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sábado, 27 de enero de 2024

4ª de La Vía Verde

 

 07-01-24

4ª de La Vía Verde 

          Aparcamos junto al coliseo internacional de juegos autóctonos desde donde arrancamos el día de hoy. Dejamos a la derecha el frontón cubierto, cruzamos  el Eresma por el puente de la antigua carretera contiguo al de nueva construcción realizado con unas vigas gigantescas de varias toneladas, aprovechamos que pasa un paisano que nos comenta que vio su ejecución, a la pregunta de como se colocaron esas vigas, nos responde, muy fácil ¡cogiendo uno de cada punta!

El viejo y el nuevo.

           No tenemos más remedio que ir un pequeño tramo por el arcén de la SG-V-3122 hasta Los Rompidos, desde donde tomamos el Camino Real de Añe del que vamos disfrutando  cuando descubrimos un pequeño rebaño de corzos pastando tranquilamente en medio de una joven chopera que nos permite disfrutar de su calma y armonía. Una cautivadora imagen verlos tranquilos, no cabe duda, es un animal que enamora, levantan la cabeza y nos miran,  parecen preguntarse ¿serán de los buenos o de los malos? nos vamos para dejarlos tranquilos.

          ¿Qué ven nuestros ojos? En lo alto de una pequeño lomo vemos lo que nos parece un castillo.
    

¿El castillo?

          Para no pisar las tierras tenemos que hacer un pequeño recodo del fraile para acercarnos al presunto castillo, cuando llegamos vemos las dos parejas de cigüeñas que habitan con  dos nidos que forman parte del conjunto de lo que en principio creímos un castillo y parece que fue una torre de vigilancia del despoblado de Carrascal de Gumiel. Claramente se ve que ha vivido tiempos mejores, pero es indudable que tiene ese carácter y encanto que imprime el tiempo y al Comando Peñota le gusta tanto. Está situado en un punto alto, poquito, pero suficiente para otear el horizonte, hoy en día está habitada por dos parejas de Ciconia Ciconia que no tardando mucho tendrán descendencia. . 

Nidos adosados.
  
          El ático de las cigüeñas tiene que tener unas vistas privilegiadas de los meandros del Eresma y de los cientos de chopos que se han plantado en sus márgenes que ahora desnudos están preciosos pero vestidos con su ropaje verde darán ganas de comérselos en ensalada y en otoño teñidos de mil ocres diferentes ¡el espectáculo!
 

Puerta secreta.
        
                    Nos llama la atención ver lo que se supone fachada principal esgrafiada.


Esgrafiados, chopos, ladrillos y canecillos.

                      Desandamos el recodo y cuando llegamos de nuevo al Camino Real de Añe le cruzamos para dirigirnos a La Dehesiilla, donde a nuestra izquierda se ve lo poco que queda de lo que pudo ser San Pedrillo, un sencillo y pequeño trozo de muro de este situado en el despoblado de Gumiel, acompañamos al río y a los plantíos de "chopolus populus" hasta que llegamos al camino de Valverde a los Huertos, cuya dirección tomamos para pronto cruzar de nuevo el Eresma.

Puente deficiente.

          Dejamos el río atrás para encontrarnos rápidamente con nuestra ya querida Vía Verde que tomamos a la izquierda, en la Rinconada de la Vega donde cruzamos una pasarela sobre el arroyo de Roda que le ha usurpado el nombre al arroyo de San Medel.

Ancho de doble vía.

          Ya por La Vía vemos al fondo una pareja de mujeres cogiendo níscalos que se desvían por la derecha, nosotros pasamos el paraje de Las Cabezas y tomamos el mismo camino para acercarnos a la ermita de la Virgen de las Vegas, allí coincidimos con las presuntas recolectoras. Tras charlar con ellas nos sacan del error, no son recolectoras, al contrario, son repobladoras, nos comentan que llevan tres años sembrando bellotas de varias especies diferentes, dicen estar un poco decepcionadas porque después de tres años no ven fructificar su trabajo. Las animamos a continuar con su "hobby-labor", nos preguntan de donde somos y una de ellas nos comenta que un paisano de El Espinar trabaja en Segovia con ella, nos despedimos animándolas a seguir con la labor ¡hasta la próxima!

           Pasamos a observar la ermita que consta de una única nave de planta rectangular y considerables dimensiones, a la extensión de la nave hay que sumarle la altura pero a la vista de los abundantes y contundentes contrafuertes estamos seguros de que aguantan muchos y fuertes "empujones". Tiene un soportal con puerta de hierro que se haya abierta y que en caso de necesitar resguardo vendría bien. La puerta de entrada es de madera, está cerrada con una pequeña ventanilla que deja ver con dificultad el interior. Posteriormente nos enteraremos que hace cuarenta años fue robada la imagen de madera policromada de la virgen del siglo XVI además de otros elementos a lo que habría que sumar los desperfectos.

Frente.

Lateral.

Ventanuco.
                
     Ahora nos dirigimos al pueblo, en sentido contrario. Vamos por el Camino de Santiago de Madrid en en tramo que va desde Valseca hasta Añe pasando por Los Huertos hacia donde nos dirigimos. En el camino nos encontramos un hito que reza 209 km. que no nos encaja en ninguna de las dos direcciones.
        
Mojón del Camino de Santiago. 

          Llegamos al pueblo y nos acercamos al parque, un lugar idóneo para el capitulo que nos toca, que no es otra cosa que la pitanza, momento memorable de todos los días, es un parque muy bien cuidado, por el este canalizado discurre el arroyo de Roda, banda original que nos arrulla y que una vez disfrutado el refrigerio nos hipnotiza ¡arriba! Nos vamos a ver la iglesia, nos encontramos que la fachada principal está oculta por un exceso de vegetación. No tenemos claro si es de nuestra Señora de la Asunción o de la Inmaculada Concepción.

          Siempre nos llama la atención como es posible que en pueblos tan pequeños hayan iglesias tan grandes y con historias apasionantes, esta en concreto se levanto a finales del XVI, el púlpito es de 1602, lo hicieron los frailes carmelitas por el módico precio de dos fanegas de cebada, por el transporte y montaje cobraron una fanega más de centeno,  (no dice si son fanegas de extensión 6560 metros cuadrados o son fanegas de volumen que también las hay y que tienen una capacidad de 55,5 litros) en el año 1734 se colocó la veleta, en 1673 la campana mayor y más y más... Brillante, apasionante, no acaba uno de sorprenderse, la rodeamos y vemos que  adosado a su espalda se encuentra un cementerio muy bien cuidado.

Luces y sombras.

          Antes de abandonar el recinto de la iglesia un ultimo vistazo a Los Huertos.

Dentro de la bola del mundo tambien caben Los Huertos.

          Nos despedimos de los huerteños dejando el pueblo atrás por la calle de la iglesia que pronto deja de ser calle para convertirse en camino que nos devuelve a nuestro propósito, la Vía verde, que claramente nos muestra la dirección a la meta.

No tenemos.

         El cartel nos avisa que llegamos al pueblo donde tenemos la meta.

Antiguo Fontanares de Erd-sama.

          Llegamos a la pedanía donde nos encontramos los edificios e instalaciones de la antigua estación, hoy en un estado lamentable dado su abandono aunque el paso del tiempo le da carácter y esa belleza de actor maduro que está pidiendo a gritos ser reenganchada al trabajo, no sabe que eso no va a volver a ocurrir.

Fachada norte



Cambio de agujas completamente deteriorada.

Fachada sur.

Hasta la próxima.
        
                   Volvemos de nuevo al campo de juegos vernáculos de tanga y chito, decimos adiós a los hontanariegos y nos vamos.



  


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lunes, 22 de enero de 2024

3ª de La Vía Verde

 

 10-12-23

La Vía Verde desde Valverde


         Vamos a intentar hacer la tercera, si la mano, el tiempo y las autoridades competentes nos lo permiten, para ello entramos desde el "policromo" Nicomedes García al camino que lleva a la ermita de La Aparecida donde acabamos la etapa anterior, desde aquí arrancamos. Cruzamos el puente sobre el río Milanillos desde donde tendremos que hacer un retoque debido a las obras del AVE,  en el punto que coincidimos con la Cañada Real de Merinas tomaremos dirección norte y enseguida nos encontramos con la primera "incógnita-belleza", un arbolito de bonito color otoñal, a simple vista de inexpertos nos da la sensación de que puede pertenecer a la familia Quercus, tiene la particularidad de amarillear sus hojas, posteriormente descubrimos que puede ser una especie denominada Quercus fagínea también conocido por roble valenciano, que a la curiosidad del amarillear habría que añadir que sus hojas son similares a las de las encinas y sus frutos no son las bellotas sino agallas. La naturaleza no deja de sorprendernos, habrá que preguntar a los "súper cicutas".

Vía verde con su curioso vecino, Quercus faginea???

         Antes de terminar esta primera recta vemos al fondo a un "vendimiador", llegando a su altura cruzamos nuestro primer puente sobre el río Eresma de la Vía, vemos que baja con bastante agua lo suficientemente oscuro para revelarnos la falta de plantas potabilizadoras en nuestros ríos.

Río Eresma.

         Cuando nos acercarnos vemos que el producto de la "vendimia" que recoge afanosamente son endrinas, al tiempo que llena una bolsa, charlamos y nos comenta que a él le gustan los frutos tardíos, según se explica algo entiende sobre ellos, le dejamos con su tarea mientras que seguimos acompañando al río separados por una pequeña franja atestada de zarzas y endrinas entre otras, el ciclista recolector nos adelanta para pararse de nuevo frente a otra planta repleta de frutos, nueva charla, no es que se dedique al trafico ilegal de pacharán, lo hace por placer y la mayoría lo regala a familiares y amigos, nos despedimos.

         Te quedas pasmado cuando en el sitio más inverosímil te encuentras con el llamativo nombre Hospedium Hotel Caserío de Lobones un hotel de cinco estrellas dentro de un caserío con cuatro siglos de antigüedad y que poco se podrían imaginar sus antiguos moradores que acabarían dando bodas y hospedaje de alto copete en un lugar tan recóndito. Desde fuera solo conseguimos ver un pequeño campanil y un abeto de graciosa formación que da la sensación de saludar al visitante.

Poca afluencia tenemos hoy.

         Dejamos atrás el caserío mirando al cielo para descubrir que algunas nubes disimulan lo que nos parece una autopista para aviones mientras que a ras de suelo nosotros seguimos disfrutando  de las delicias del día de hoy.

Vía pacis.

          Una nueva recta nos deja ver al fondo nuestro objetivo mientras que un protector ejercito de chopos guardan la entrada al pueblo.

Al fondo hay sitio.

      Hacemos el primer tramo de la etapa y llegamos al pueblo, oímos bullicio ¿Dónde va Vicente? pues a la mismísima plaza del ayuntamiento, justo enfrente está el único bar donde nos mojamos el gaznate con una cerveza y nos dan un rico y abundante pincho, parece mentira, está atestada de gente, cinco  chiquitas simpatiquísimas no dan abasto, nosotros por nuestra parte nos vamos al comedor para disfrutar del bocata que tarda poco en esfumarse.   
      

Desde nuestro comedor.
       
          Le damos una vuelta a la sencilla iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, creemos que era la que tenía el vino que no era blanco, ni tinto, ni tenía color. Su construcción está datada en el siglo XVII, nos dijeron que tiene un órgano precioso, estaba cerrada, no pudimos entrar. 

Porche y la sencilla puerta pral.

         Comenzamos la vuelta dándonos un paseo para encontrarnos primero con una pieza de arte rural, una puerta de garaje de madera a la que han hidrofugado milimétricamente montando un puzzle de chapas posteriormente pintadas con el talento de la sabiduría y el arte rural.

Pasada por el chapista.

                  Otro detalle nos llama la atención, un pequeño y sencillo esgrafiado, pero no por ello menos bonito, le suponemos hecho por un hontanariego que ha adornado esta esquina con una representación del acueducto coronado con varios  soles  que nos traen de nuevo a la cabeza los versos de María Zambrano que tanto nos gustan:      

    En Segovia la luz no se posa desde el cielo, sino que se proyecta desde la ciudad misma.

 

La corona de soles del acueducto de Segovia lo ilumina todo.

         Bajando la calle Sol vemos una fuente en muy buen estado, tiene grabada una leyenda que reza 1284 que suponemos sea su año de construcción.

         Charlamos con un paisano que nos ofrece una visita guiada de su  colección de objetos de los siglos XIX y XX reunida con mucho tiempo y mucho trabajo y que denomina como museo Cochaca, nos enseña con orgullo su nutrido museo etnográfico, no menos laborioso y bonito es el ingente trabajo realizado en el solado, es una gran colección con varias centenas de piezas donde hemos disfrutado de su visionado y de unas cuantas explicaciones sobre objetos completamente desconocidos para nosotros. Una mirada al pasado acompañada de una amena charla muy agradable, llega el momento de despedirnos ¡hasta la próxima, Julián!

Una pequeña parte de la exposición.

          Dentro de la gran variedad que tiene nos pregunta si sabríamos reconocer el posible uso de un objeto, no caemos, explicación rápida, tiene más un siglo, lo hizo un paisano para su nieto, sería el inventor de la primera trona para bebes.

Una pena que no se aprecie la belleza de la pequeña trona.

           Antes de irnos pasamos por la "universidad" donde coincidimos con el "catedrático", entre otras curiosidades nos comenta que hace siete siglos el sitio se llamaba Fontana de donde deriva el nombre actual y era porque por aquellos entonces abundaban las fuentes, tambien nos explica la famosa hipótesis que dice: “en Hontanares cuatro huevos son dos pares",  hipótesis ésta genuinamente segoviana.

         Aún asombrados abandonamos el pueblo y nos damos media vuelta para despedirnos de Hontanares ¡Hasta la próxima!

El "trigüemino" bruno.

         Cuando  el Eresma en uno de los múltiples meandros se acerca a La Vía, nosotros aprovechamos para abandonarla y tomar un camino paralelo, donde descubrimos la  perfecta formación de la chopera.

Alineación derecha, ¡Ar!
         

         Abandonamos la plantación de clones de pópulos para encontrarnos con una mini granja donde descubrimos al actor principal de la epístola 
que cantaba Nuevo Mester de Juglaría:
Estaba Cabrin Cabrate
en una peña peñascate
y vino el lobo Lobate...

Ante la necesitaten no hay pecaten.

         Cruzamos el cauce seco del presunto arroyo de Valdelobones que rima con el cruce que dejamos ahora a nuestra izquierda que lleva al Caserío de Lobones, nosotros nos dirigimos al puente que cruza el Eresma.

Preciosa obra de ladrillo segoviano.

          Empezamos a entender el porqué del apelativo de La Vía Verde del Eresma, desde el primer día que coincidimos con él y nos hemos hecho inseparables. Ahora le cruzamos por segunda vez para a continuación  encontrarnos con la Cañada Real de Merinas, que era nuestra idea primitiva para llegar a nuestra meta, pero optamos por otra variante, para ello continuamos y cruzamos un nuevo puente para librar ahora al río Milanillos, más tarde nos encontraremos con el mismo, imposible cruzar debido a las obras del AVE ¡media vuelta! Caemos en la cuenta cuando vemos como la flora está fagocitando lenta pero inexorablemente la SC-SG-20.

La naturaleza deja claro el desuso de la carretera al tiempo que la adorna.

          Después de corregir el rumbo, pensado en regresar a la idea primigenia de La Cañada Real de Merinas, estudiamos el tema. Dejamos a la derecha el camino de Lobones y seguimos de frente.

Mojón

          Continuamos dirección noroeste y pronto vemos un paso bajo las vías idéntico al que salvamos al principio de la etapa con la salvedad de que por este pasa el arroyo del Valle. Afortunadamente trae poco caudal aunque por donde hacemos la entrada que en este caso es la salida del riachuelo la tiene descarnada, nos cuesta un poco contando con que estamos lisiados, afortunadamente entramos y mojándonos un poco los pies logramos cruzarle y cuando salimos caemos en la cuenta que al lado hay un paso para vehículos.

Hoy hemos visto la luz al final del túnel.
 
          Salimos justo al "palíndromo" Nicomedes García, recorremos la arteria paralela a la línea del tren, a estas horas del sábado somos los únicos viandantes, llegamos al coche y para casa, solamente nos ha faltado comer unas perdices para ser completamente felices.

Feliz año nuevo nuevate
de parte del
Comando Comandante
Peñota Peñascate.








          






         



 


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