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miércoles, 13 de abril de 2022

12-02-22 Maello-Labajos-Maello

 


12-02-22

Maello-Labajos-Maello

Prefacio

     Hoy hemos empezado el día dándole la vuelta como a un calcetín, hemos modificado íntegramente el guion. La primera idea era hacer la salida desde Blascoeles para llegar a Maello y posteriormente volver, aquí damos el primer giro al libreto y a la etapa de la jornada, para ello nos vamos a Maello y desde allí comenzar el trayecto en sentido inverso al planeado.


          A la llegada al pueblo, antes de entrar, el abuelo Cebolleta tiene un "déjà vu", del semisótano del cerebro desentierra el recuerdo de su única visita a Maello anterior al día de hoy. Mucho polvo hay que quitar de encima a ese recuerdo para rememorar la fecha, en números redondos (entre albañiles) medio siglo. La ley de la casualidad universal tuvo verdaderos quebraderos de cabeza para llevarnos a disfrutar aquel día de su fiesta del Rosario, que razón tenía nuestro admirado Einstein cuando desarrollo su teoría de la relatividad. Por aquellos tiempos no nos podíamos ni imaginar llegar al año 2000 y hoy, ya en el año 2022 parece que fue ayer, aunque verdaderamente a simple vista se aprecia la mutación que ha sufrido el pueblo, la carretera, las casas, nuestro lujoso vehículo por aquellos entonces, el famoso "ocho y medio" y sobre todo nuestra querida y casi olvidada adolescencia...




 El Torico

        El Torico (plaza y "monumentico" de la ciudad de Teruel) que no tórico (referido a la junta de forma toroidal) nos viene a la cabeza obligatoriamente cuando callejeando por Maello en dirección a la iglesia nos ha parecido ver "un lindo torico". 


🎵🎶 ¡Teruel existe!, ¡Teruel resiste!
Torico, ¿qué haces subido ahí?
🎶🎵


        Aparcamos frente al templo y lo primero que hacemos es acercarnos a contemplarle, nos sorprende encontrarnos una gran cabecera cuadrada reforzada en sus esquinas por unos robustos contrafuertes que la abrazan, la inmovilizan y que nos da la sensación de que la hacen inmune a la caída. Cuando nos ponemos frente a la puerta principal vemos claramente que así es, y observamos también como el antiguo cuerpo central ha desaparecido en su altura primigenia y el actual está claramente reformado.

          Una multitud de cicónidos tienen colonizados el campanario y todos los rebordes, salientes y chaflanes de la cubierta de la cabecera, está claro que les gusta la iglesia de Maello a las cigüeñas, nos comentaba nuestro nuevo amigo que el año pasado tuvieron que reducir los nidos con un gran despliegue de medios auxiliares.


Iglesia de San Juan Bautista.


         Adosado al renovado cuerpo central vemos el campanario que a diferencia de la granítica cabecera está realizado en ladrillo, seguramente sea posterior. A pesar de los estragos producidos por el paso del tiempo que le han dejado huella, le vemos varias curiosidades. La espadaña acoge una campana bastante más grande que las del campanario, bajo su campana hay un reloj que muchos años atrás dejo de marcar las horas...

🎵🎶 Reloj, detén tu camino
                     porque mi vida se apaga 🎶🎵


         A la altura del tercer cuerpo de la torre hay una pequeña ventana románica sobre la cual vemos una placa que reza:

El Excelentísimo Señor 
Marqués de la Torrecilla 
donó este reloj 
a sus electores de Maello
febrero de 18५1

         El número que se ve borroso creemos que es un 9 y se supone que al marqués que se refiere es Andrés Avelino de Salaver y Arteaga con unos antecedentes absolutistas, X duque de Ciudad Real, VIII marqués de la Torrecilla, XI conde de Aramayona, IX marqués de Navahermosa, IX vizconde de Linares, grande de España y jefe superior de Palacio de Alfonso XIII y una legión de nombramientos más entre los que esta su elección como diputado conservador por Arévalo, suponemos que sería al momento que se refiere dicha placa, no nos podíamos imaginar que una persona pudiese tener tantos epítetos ¡asombroso! ¡Bueno ya!


Campanario.


        Después de contemplar esta bonita edificación obligatoriamente nos tenemos que acercar a cerciorarnos si lo que hemos visto anteriormente era real o un espejismo. Cuando llegamos al principio de la calle Sol nos damos cuenta de que no era ningún espejismo ¡ahí está! "El Torico" este con apellido, Del Rosario se le ve mejor alimentado que el turolense ¡que casta! ¡que lustre! Muy bonito.

El "Torico" de Maello.

         Después de darle unos capotazos, volvemos a por los bártulos, justo antes de comenzar cruzamos unas palabras con Pablo que entre otras cosas nos comenta que el camino en el que estamos es el que va a Labajos, que está a cuatro km solamente, que si patatín que si patatán. Le decimos adiós a Pablo y en este punto hacemos el segundo cambio de planes de la jornada. Después de considerar la salida de lesión, la distancia, la climatología, total que nos vamos a Labajos. Salimos del pueblo a la derecha la Hoya Vasijeros, a la izquierda Orosordos, subimos paralelos al arroyo del Milano escaso de agua disfrutando de la vista de las preciosas formas que se dan en las cárcavas, muy abundantes por estos lares.


¡¡¡Las altas cárcavas!!!


        Un vistazo al sur, al punto de partida, lo que vemos nos parece una reproducción de la llegada a Blascoeles con la bandera de Santa María del Cubillo como la viésemos en la anterior etapa con la Sierra de Ojos Albos con el sol justo encima, que está muy bien señalado por el sol, curiosamente también los dos pueblos están situados en una pequeña depresión. 


"Pueblo iluminati"



         Cruzamos el túnel que nos permite salvar la autopista, camino a la Campiña Segoviana.


Pasaje bajo AP-VI


        Dejamos atrás el subterráneo, seguimos el camino que hace un ángulo recto que nos acerca a la frontera para salir de la provincia de Ávila y entrar en la Campiña Segoviana, en este momento nos viene a la cabeza una avalancha de imagines, fronteras, sembrados, trigales, un bonito cielo, un aluvión de reflexiones. Parados en medio de la frontera artificial, con un píe en cada provincia, estamos en un entorno muy sencillo, rodeados de tierras cultivables, unas en barbecho, otras sembradas, algunas de ellas ya han germinado con las recientes lluvias, se ven hermosas, recién hidratadas y verdes, de un verde esperanza de la que tan necesitada esta la humanidad. Así, abrazados por las llanuras avilo-segovianas llenas de vida, pacificas, apacibles, tranquilas y con un día tan bonito se nos llena el corazón y la sesera con la palabra ¡PAZ!, ese ingrediente que invade al Comando Peñota en sus peripecias y que nos hace tan felices.
         
      Nos baja de las nubes la cercanía de la N-VI a la que acompañamos unos metros hasta que la cruzamos para seguir por el camino que traíamos que se dirige a la iglesia y claramente se ve que en su día fue cortado por la carretera. Entramos al pueblo y al poco nos llevamos una tremenda sorpresa, poco podíamos imaginarnos que nos encontraríamos un "mar interior" y anclado en él un "velero bergantín", (embarcación de dos palos, el mayor, trinquete, bauprés y una cangreja por vela mayor) con el ostentoso nombre de Coloso II. Nos encontrábamos contemplándole cuando coincidimos con Jesús (acordándonos de nuestro querido lobo de mar) entre otras cosas que comentamos no podemos quedarnos sin preguntarle ¿vive un capitán de la marina mercante aquí? Nos contesta que sí, el que fuera el inductor de este proyecto y que, contando con colaboración de carpinteros de ribera, maestros de azuela, veleros y calafateadores (todos vecinos del pueblo) construyeron el Coloso I que al ser su primer barco duró poco. Esto no les acobardo y poniendo de nuevo manos a la obra hicieron un nuevo buque que es el recién descubierto por nosotros Coloso II. Zanja el tema nuestro amigo diciéndonos que por este motivo les llaman a los labajeños por los alrededores "los del barco". Como llevamos el mismo rumbo, charlando llegamos a la plaza de la iglesia, creyendo que se da media vuelta se despide, pero no, se dirige a una pequeña casita que hay a quince metros de la iglesia, le preguntamos ¿no llegaras tarde a misa? y antes de cerrar la puerta se despide diciendo ¡yo hasta que no veo que llega el cura no me visto! Muy cordial él, nos deja con una sonrisa en la boca.



"Mar y bergantín Labajeño"


         Como nos han abandonado el cicerone enfrente de la fachada principal de la sencilla pero bonita iglesia tenemos que admirarla, vemos que la esquinas y contrafuertes son de mampostería de granito que no creemos que abunde mucho por estos lares, la fachada del cuerpo esta fraccionada por pilares de ladrillo rellenados entre ellos con cantos rejuntados con mortero blanco, las puertas y ventanas recercadas del mismo ladrillo, se la ve que recientemente ha sido remozada.


Iglesia de San Pedro.


         Cuando la rodeamos descubrimos una tremenda torre que acoge el campanario con tres cuerpos, necesariamente altos para poder asomar por encima de la cubierta de la también alta nave central, coronada por una espadaña desprovista de campana lo cual nos permite ver los globos y la flecha de dirección. Por encima de ella sobresale una cruz ornamental, nos hubiese gustado ver el interior, hoy no es posible, está cerrada, a la carpeta de pendiente y si el próximo veintinueve de junio festividad de San Pedro podemos, nos acercaremos.

          Adosada a la espalda hay dos pistas que suponemos se usarán para tanga, calva y petanca, aunque se las ve poco usadas.

           La fachada oeste de idéntica ejecución que la fachada principal luce realmente bella, nos encanta, los sillares de las esquinas realizadas en granito resaltan sobre el ladrillo, en el centro entre dos pilares de ladrillo y ribeteadas hay arriba una pequeña cristalera emplomada, abajo un llamativo arco, entre medias y de arriba abajo podemos ver una curiosa y pequeña formación que nos recuerda a nuestras Miras, una hornacina con una cruz en su interior, bajo ella hay una placa de la que únicamente podemos leer "...de lavajos", un pequeño arco más y dos curiosos "ojos de buey", una fachada imponente.


Joya recién restaurada.


         Antes de salir de la espaciosa plaza de la Constitución damos media vuelta para encontrarnos delante del ayuntamiento, un edificio rectangular también reformado recientemente, le han eliminado todo el mortero de la fachada dejando a la vista la piedra rejuntada y una preciosa arcada de ladrillo.


Consistorio.


         Llegó la apetecible hora del tentempié, aquí nos viene a la cabeza el cocido labajeño hecho con los riquísimos garbanzos de Labajos para los cuales están exigiendo la marca de garantía semejante a la de Valseca. Hoy nos conformaremos con un bocata de la chef del Comando que cuenta con tres estrellas Michelin y tres soles de la guía Repsol. 

         Una vez terminado el ágape nos dirigimos a ver al "Torico" de Labajos al que vemos que ha dado un estirón, palpable por el tamaño del escroto.

         El "Torico" de Labajos es libre, anda suelto por el campo y le vemos recortado al noroeste, en dirección al lugar del Tío Lucas, el rey de las dehesas, domina desde su mirador la vastísima meseta avilo-sego-vallisoletana.
"El torico de Labajos"

🎵🎶
Y ese toro enamorado de la luna
Que abandona por las noches la manaaa
Y es pintado de amapola y aceituna
Y le puso campanero el mayoral
 
🎶🎵


          Nos despedimos del "torico" de Labajos para regresar a nuestro punto de partida, ahora nos dirigimos hacia el sur, no queremos que se nos quiebre la armonía y la paz del día de hoy, para ello evitamos al polémico monumento levantado a Onésimo Redondo, que fuera fundador de las Jons, muerto a manos de los republicanos en Julio del treinta y seis, para no acordarnos más de las guerras. 

         Salimos del pueblo por la calle de Ávila con la idea de cruzar la autopista por el puente del punto kilométrico 93,700 pero según nos vamos acercando se nos dislocan los planes, un gran despiste (nos hemos olvidado los "chubasqueiros" en casa) y la confirmación de lo que habíamos visto en la página web climatológica (lluvia) nos hacen cambiar de idea y redirigirnos de nuevo para volver camino inicial, para ello cuando llegamos al semiseco cauce del arroyo de Valdesecano nos vamos a encontrar al camino de servicio, comienza a llover, lo que no es inconveniente para una cuadrilla de conejos que se mueven felizmente despojados de ropajes y sin paraguas, demasiado confiados. Los dejamos atrás pero no la fauna, aparecen tres corzas que vienen de Valdiego y toman nuestro mismo derrotero, corren más que nosotros. Cuando llegan al cambio de rasante de repente se frenan, recortados en una hilera frente a nosotros. Desde su mirador nos observan curiosos, recortados sobre el "lomo de la loma" su agradable visión nos hace más llevadera la caladura, nos preguntamos que se preguntaran. Se van, seguramente no tengamos la misma imagen idílica que ellos. Llegamos al punto donde desaparecieron las corzas, ya sabemos que era lo que nos querían decir porque aquí comienza el camino de servicio que va paralelo a la autopista y que nos lleva al puente en un periquete con la idea de resguardarnos un poco Mala idea, muy mala idea, la conjunción de los cuerpos empapados con la húmeda y fuerte corriente que hay bajo el puente nos hace salir corriendo de él, es preferible empaparse que aguantar las ráfagas de aire atravesándonos músculos, vísceras y huesos. Nada más salir bajamos la Cuesta Labajos y llegando a Orosordo a la izquierda, por la Hoya Vasijeros descubrimos un cónclave de cigüeñas, una multitud, se mueven articulando sus huesudas patas al tiempo que lanzan inmisericordes y certeros picotazos a la caza de lombrices, ranas, culebras y cualquier alimento porque ahora más que nunca le son necesarios para coger peso con vista a la cercana puesta de huevos que será en un mes o mes y medio.

          Nos acercamos al pueblo justo cuando nos deja de llover, el olvido de los impermeables nos ha premiado con un remojón antológico, llegamos a la altura del cementerio que como está adosado a la iglesia nos vemos en la meta en un santiamén. Cogemos el coche y en otro santiamén nos presentarnos en casa y como parece que nos hemos mojado poco una ducha durante la cual cantamos el famoso éxito de José Luis Cantero Rada, mundialmente conocido como El Fary que dice:

      🎵🎶  Vaya torito
   Ay, torito guapo
Tiene botines 
                  Y no va descalzo  🎶🎵


 
 
 


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