Andanzas segovianas del Comando Peñota
variante
Camino de San Frutos
"2ª mini-etapita"
La Lastrilla-Espirdo-Tizneros
Hoy de nuevo aparcamos en Espirdo, en la calle Real cerca del ayuntamiento y para hacer la etapa de hoy nos ayudaremos de "la logística". Después de estudiar el tema vemos que hay un autobús que parte de Santo Domingo de Pirón, pasa por aquí, nos llevara a Tizneros y luego a Segovia, y de allí iremos en el mismo microbús a La Lastrilla. Conducidos por una encantadora joven, buena conversadora y mejor conductora que nos ha llevado por una ruta con muchos ringorrangos pero muy romántica. Entre otras muchas cosas nos indica la parada final más beneficiosa para nuestros propósitos, que no es otra que la situada enfrente de Cárnicas Valverde, nos despedimos de ella diciendo que nos volveremos a ver.
"Comenzons" (dicho en el francés de Tip y Coll) bajamos por la calle Camino de Valseca (vía que se utilizaba antiguamente para ir a por sus ricos garbanzos) dicha calle termina o empieza según como se mire en la calle del Camino de Zamarramala que ya pisamos en la anterior visita y que nos lleva de nuevo a la iglesia de la que representamos el ultimo día su entrada principal, hoy mostraremos la fachada sur.
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Pronto han puesto la estrella. |
Hacemos un "recodo del fraile" y llegamos a una rotonda situada justo enfrente de donde nos dejo nuestra conductora favorita y desde aquí tomamos el camino de San Frutos dirigiéndonos al norte, pasamos por la puerta del cementerio y antes de dejar el extrarradio del pueblo nos despide un conocido para el que tenemos algún deseo que le pedimos y que directamente nos niega porque sabe que nosotros somos más de Reyes Magos.
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Ahí te quedas |
Se queda tranquilamente esperando a Paco Pepe, nosotros continuamos, cruzamos Los Losares y nos encontramos con la vía de servicio donde dos mojones nos indican por duplicado la dirección a seguir.
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Redundancia segoviana.
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Millones de cardos corredores (nombre que nos enseñó el maestro hace unos días) han visto paradas en seco sus excursiones atrapados en la "red" que salvaguarda la seguridad de la SG-20, unos metros en la trayectoria que nos ordena el doble mojón y que nos acerca a un puente que cruzaremos, pero antes vemos la cartelera de la "película" que ponen hoy en "el cine del puente de Los Losares" y que se titula "La mujer muerta"
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En cinemascope. |
Salimos del cine, perdón del puente y como en la vida misma tenemos que "levantarnos" lastrados por los múltiples problemas que se nos yuxtaponen al cerebro. Decíamos levantarnos y continuar, eso es lo que tenemos que hacer. En estas estamos cuando nos damos cuenta que vamos por el camino equivocado, damos marcha atrás, volvemos al camino correcto y llegamos al cruce que debemos tomar. Nos tenemos que esperar, estamos en hora punta, está el camino abarrotado, tenemos que dejar que pase la caravana, mientras hablamos con el rabadán que nos comenta la cantidad de hembras, perros, corderos, machos que son dos, de los cuales de ellos capado, menuda bestia el otro ¡un fiera! Pasan rápida y ordenadamente supervisadas por una cuadrilla de perros bien adiestrados y el ojo matemático del "Profe" que como todos los pastores además son geógrafos, filósofos, y unos hombres del tiempo inmejorables, nos indica que vamos por buen camino y nos despedimos.
El que adivine el número de ovejas que tienen a su cargo entre el pastor y el macho se ganara un café o un chocolate y al que adivine el nombre del macho castrado ganara un bocata de mortadela y el que adivine el del macho entero se gana bocata de calamares.
El pastor nos enseña una sencilla fórmula para adivinar la cantidad exacta de ovejas,
N = número de patas / 4
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¿Cuantas hay? |
Ya por el camino correcto llegamos al paraje de Los Almajanos, donde vemos a la izquierda el vértice geodésico nº 48329 situado en el cerrillo de La Cabrilla que está a 1095 m. Llegamos a un cambio de rasante que al asomarnos a él nos muestra el pueblo, bajamos hasta la ribera de arroyo de San Medel donde enlazamos como no podía ser de otra manera con... el camino de Bernuy, doscientos metros y conectamos con la nacional que nos acerca en menos que canta un gallo al pueblo donde nos acercamos a “La Despensa de Espirdo” a comprar una barra de pan y dos refrescos con los que mitigamos la sed en el banco de enfrente. A continuación nos vamos por la Calle Heras preguntándonos cuál será el gentilicio de los habitantes de Espirdo, nos aventuramos con varias posibilidades, todas igual de vistosas, espirdonianos, espirdones… Salimos del pueblo por el camino del mismo nombre de la calle y nos damos cuenta de que vamos errados ¡media vuelta! Otra vez a nuestras reflexiones, espirdos, espirdenses… Llegamos a pensar que como son descendientes de los primeros pobladores que venían de Calahorra que si podría ser que se les dijese calagurritanos de Espirdo. Bueno, ¡estamos tontos! ¡Nos hemos vuelto a equivocar! Hemos vuelto a salir del pueblo esta vez por el Camino En medio. Marcha atrás para coger la calle Centenera hasta el cruce donde nos encontramos de frente calle Camino Mingorrero, la Calle Real a la izquierda y nosotros nos vamos por la derecha para ahora sí dirigirnos nuestro objetivo a la carrerilla.
Vamos por una estupenda acera que nos permite disfrutar de un maravilloso paseo, de las bonanzas del día y de las llanuras segovianas. Sorpresivamente aparece una pequeña charca natural con una serena belleza, como la música nos ocasiona paz espiritual. La visión del estanque en completa calma te paraliza la lengua temporalmente, pero por el contrario nuestras cabezas sobrevuela como una libre libélula por encima de ese espejo acuífero al tiempo que nos vemos reflejados en él. Tras el corto y agradable vuelo ponemos de nuevo los pies en el suelo momento en el que comenzamos a "masticar" la calma que estimula al hipotálamo que descarga endorfinas inundándonos de paz, liberación mental y armonía, cosa que agradecemos infinitamente pues buena falta nos hace.
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Espejo de paz. |
Como no podía ser de otra manera nos vamos tranquilamente, pero tenemos que volver a lo nuestro y en un tres por cuatro llegamos a Tizneros, nos acercamos al complejo formado por el polideportivo, el gimnasio exterior, la iglesia y nuestro comedor, todo un lujo que nos permite disfrutar de nuestro ágape, un vez hemos dado cuenta de él nos acercamos a la pequeña iglesia barroca de San Juan Bautista con una bonita espadaña de tres ojos realizada con ladrillo, una sacristía adosada al costado del templo adornada con algunas obras de arte.
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Parroquia de Tizneros. |
Nos encontramos un par de detalles de auténtica construcción rural, una "puerta cubista", parcheada por un virtuoso, a su lado vemos lo que podríamos denominar de resto arqueológico, pensamos que es una especie de celemín gigante que no sabríamos decir su utilidad pero si alabar su belleza, es un precioso cajón gigante realizado en una pieza de un gran tronco, un laborioso trabajo, es una pena que se le acabe la vida, merecería ponerle a buen recaudo.
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¿Celemín de 100 litros? |
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Puerta diseñada por Picasso. |
Dejamos atrás la iglesia y nos vamos a dar un garbeo por el pueblo. La tranquilidad es infinita, la pequeñez del pueblo y la situación actual deja huérfano el lugar. Silencio, no se mueve ni el viento. Buscando la fuente encontramos un típico rincón decorado anárquicamente pero de gran belleza y que vemos a menudo por los pueblos de esta zona.
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Ahí queda un hueco para otra piedra. |
Continuando con el rodeo nos damos cuenta de que hay vida, mantenemos una agradable charla con un triunvirato formado por madre, hijo y nieta simpáticos, dicharacheros y a los que seguramente volveremos a ver, nos despedimos e iniciamos la vuelta llegando de nuevo a La Charca donde nos encontramos a varios residentes disfrutando de todo lo que comentamos anteriormente. Nos encontramos lo que creemos porrones y fochas.
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Ondulando
el agua |
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Espejo,
el retorno |
Desandamos la acera pero antes de terminar vemos un banco de los muchos que nos encontramos sin salir de nuestra provincia y que tenemos comprobado que te muestran las bellezas segovianas y sus maravillas, hoy nos toca disfrutar del asiento que además de regalarnos la posibilidad del descanso tiene una sorpresa guardada, el postre, un observatorio astrofísico que nos va a permitir disfrutar una puesta de sol "Espirdoniana", una maravillosa forma de rematar la etapa del día de hoy.
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Caso único, un Sol eclipsa a otro Sol. |
Abandonamos la posición del loto que nos ha dejado cansados del exceso de relajación y nos dirigimos directos al "carrimoto" al que llegamos rápidamente. Es llamativo ver los pueblos en estado de semi abandono, ¿Cuándo acabara esta Maldición? Si empezábamos aparcando en Espirdo terminamos desaparcando del mismo, pero volveremos,